Avilés, A. F.

El técnico del Avilés, Ricardo Bango, aclara que el pasado domingo dejó en el banquillo a Abraham y Naya, dos hombres básicos hasta ahora en el equipo, porque «queríamos que jugase Milio y modificamos cosas en busca de un equipo más sobrio, más sólido, más fuerte en la disputa y con más poderío en el juego aéreo, dadas las características del campo del Llanes».

Bango insiste en que el objetivo era ser sobrios en el aspecto defensivo, sobre todo, en la estrategia a balón parado, y dice que el equipo sacó una nota bastante alta. «No son pruebas, pero se cambiaron cosas para adaptarnos al campo. La forma y manera de jugar es la misma, pero con otros jugadores», señaló.

De cara a los siete partidos que restan de Liga, Bango anuncia que es posible que algunos jugadores tengan más minutos, aunque, señaló, «seguiremos buscando el equipo que pueda competir y ganar. Los jugadores que salgan tienen que rendir al máximo, y la dinámica del equipo debe ser competitiva».

Al Avilés le costó doblegar la defensa llanisca, aunque Bango habla de un buen balance ofensivo. «Logramos generar cuatro oportunidades muy claras. Yo quiero más, sin duda, pero pocos equipos le habrán generado tantas ocasiones en San José».

El domingo visita el Suárez Puerta (18 horas) el Universidad, y el trabajo de la semana sigue centrado en el aspecto defensivo. «El equipo trabaja bien, salvo cuando se gusta sobre el campo y tiene juego combinativo. Y eso nos puede pasar con el Uni, así que en defensa tenemos que estar a la altura de Llanes y otros partidos», concluyó Bango.