Madrid, Efe
«A mí lo que me gusta es que cada jugador que he llamado a jugar siempre responde. Ante Osasuna era un partido de los más difíciles que nos quedaban y tanto Granero como Albiol, que no jugaban desde hace tiempo, respondieron muy bien», afirmó Mourinho tras el 1-5 del Reyno de Navarra.
Después de someterles a un prolongado ostracismo, Mourinho recurrió a Albiol y Granero para una de las salidas más exigentes de la temporada, a priori. Las bajas de Pepe, en la defensa, o las de Khedira y Lass, en el centro del campo, dieron la oportunidad a dos jugadores cuya continuidad en el club estaba en entredicho.
Mourinho lo ve de otra forma: «Esto es la fuerza del grupo, la fuerza individual de cada uno de los profesionales. Cuando me decanto por Khedira es porque es un jugador diferente, que me da otro tipo de cualidades en el partido. En Chipre, por ejemplo, no ha jugado Alonso y me decanté por Sahin. Ante Osasuna, a pesar del buen partido de Nuri, elegí a Granero», dijo.
