Durán ha hecho su vida en EE UU. Allí se ha convertido en un profesional muy reputado. Pero tantos años fuera de Oviedo no le han hecho perder un ápice de asturianía ni de cariño por su tierra.

Una querencia que lo ha llevado a echar una mano cuando ha tenido ocasión a los equipos de baloncesto carbayones. Lo ha hecho con los equipos masculino y femenino del Universidad y ahora, sobre todo, con el Unión Financiera Oviedo Baloncesto. «Nunca he cobrado a los clubes ovetenses las comisiones que me correspondería como agente», explica. El caso más significativo ha sido el Hanley: «He tenido ofertas de ACB por Hanley que no he aceptado por ayudar al Oviedo a subir a LEB Oro. He querido ayudar a mis amigos y a mi ciudad», concluye.