El 15 de marzo, cuando salieron las bolas de sus rivales de cuartos de final en la Liga de Campeones, el Madrid y el Barcelona se dieron con un canto en los dientes. Habían esquivado a los «cocos» de la competición y aparecían como favoritos indiscutibles frente al Galatasaray y el Paris Saint-Germain. En vísperas de que se desaten las hostilidades, las apuestas siguen favorables para los españoles, pero en el horizonte se adivinan siluetas amenazantes. Son futbolistas de tanto renombre como Drogba y Sneijder, en el equipo turco; o de Ibrahimovic, Beckham y compañía en el bando francés. Viejos conocidos, íntimos enemigos en las próximas semanas.

Individualmente, la plantilla del Paris Saint-Germain tiene poco que envidiar a la del Barcelona. Otra cosa es que Carlo Ancelotti haya conseguido convertir en un equipo competitivo al puñado de estrellas que los petrodólares han puesto a su disposición. Se pudo comprobar en la eliminatoria de octavos frente al Valencia. Pese al 1-2 de la ida en Mestalla, el PSG no pudo asegurar el pase hasta los últimos minutos del partido definitivo. En ese choque no pudo estar Ibrahimovic, que sí jugará mañana frente a sus ex compañeros tras la rebaja de su sanción.

Ibrahimovic es la principal amenaza para un Barça que está sufriendo en defensa más de lo habitual esta temporada. Sin embargo, los antecedentes son favorables para el equipo azulgrana frente al delantero sueco. En los tres precedentes en la Liga de Campeones, la pasada temporada, el Milán de Ibrahimovic sólo pudo arrancar un empate: 2-3 en San Siro en la fase de grupos, empate a cero en la ida de los cuartos de final y 3-1 en su regreso al Camp Nou. En esos 270 minutos, Ibra sólo fue capaz de batir una vez a Valdés.

Drogba nunca jugó en el Madrid, pero su relación con Mourinho es tan estrecha desde que coincidieron en el Chelsea que añade morbo al cruce europeo. Recién cumplidos los 33 años, Drogba ya no es el delantero determinante de las últimas temporadas, pero está contribuyendo a la explosión del jugador de moda en Turquía, el ariete Burak Yilmaz. A sus 27 años es el «Pichichi» de la liga turca, con 18 goles en 23 partidos, y planta cara a Cristiano Ronaldo en Europa, con ocho, seis de ellos en los seis últimos partidos.

Con el Galatasaray también volverán al Bernabéu Sneijder y Altintop, dos ex madridistas que dejaron muy distinto recuerdo. Mientras que el holandés caló por su calidad, el turco pasó sin pena ni gloria. Ahora, en su casa, vuelve a ser capitán general.