Dani Navarro ha regresado de Francia con el noveno puesto en el Tour bajo el brazo, lo que le ha valido para convertirse en el quinto asturiano en figurar entre los diez primeros de la ronda gala. Confiesa que han sido tres semanas muy duras, y que el cansancio le hace dudar sobre su participación en la Vuelta a España. Tres días después de su llegada a Asturias, Dani Navarro respondió a las preguntas de los lectores de LA NUEVA ESPAÑA.

Lo primero que los lectores quisieron saber fueron las sensaciones que el ciclista gijonés se llevó de este Tour. «La primera etapa de los Pirineos fue la que más se me atragantó. No fue un buen día para mi, al igual que el Mont Ventoux. La primera porque venía de caerme dos días antes; y la segunda porque sufrí tanto por el llano que al Mont Ventoux llegué muy cansado», explicó Navarro. Sin embargo, también vivió grandes momentos, como la subida a Alpe d'Huez, cuando más de un millón de apasionados del ciclismo se dieron cita a la orillas de la carretera para vivir este deporte. «Me quedo con la cantidad de gente que hubo siempre en las etapas, sobre todo en el Alpe d´Huez, donde había mucha gente de Asturias». Decenas de paisanos del ciclista acudieron al país galo a darle ánimos, algo que no le pasó inadvertido: «En este Tour he visto mucha gente que me ha animado y cuando escuchas tu nombre y ves la bandera asturiana es muy motivante; este año ha sido increíble el cariño que he recibido por parte de todos».

Sobre el rendimiento, por debajo de lo esperado, de su ex compañero de equipo Alberto Contador, Dani Navarro no cree que se trate de su declive, sólo «es un mal año». «Lo conozco bastante bien, es una pena no haberlo visto como a todos nos gusta, dando espectáculo. Yo creo que no somos máquinas y que hay años mejores que otros; este no fue su año y el año que viene seguro que será mejor», afirmó. Además, también tuvo palabras para Joaquim «Purito» Rodríguez, de quien dijo que se mantiene «en su línea, con pódium en sus tres últimas vueltas grandes»; y del murciano Alejandro Valverde: «Tuvo mala suerte en el día de los abanicos, si no también hubiera estado luchando por el pódium».

Sobre su futuro inmediato, Dani Navarro se mostró dubitativo sobre su participación en la próxima Vuelta a España, ya que asegura que se siente «muy cansado tanto física como mentalmente». «Aún no sé si ir a la Vuelta, pero de ir creo que me olvidaré un poco de la general e intentaré disputar las etapas; este año es demasiado dura como para hacer la general», explicó el ciclista gijonés. Eso sí, reconoce que le gustaría conseguir la victoria en alguna de las etapas con final en el Principado: «Sería muy especial ganar en casa, ya sea en el Naranco o el Angliru».

En cuanto a los problemas que acechan al ciclismo, el gijonés se mostró concienciado de los mismos y aportó soluciones: «Antes salíamos muchos más a la carretera, y ha bajado el nivel. Una mejor promoción, más protección en las carreteras y que los patrocinadores apuesten más por este deporte para mejorar el deporte profesional». Sobre los casos de dopaje, Dani Navarro afirmó que «los métodos antidopaje cada vez son más fiables, pero siempre hay alguno que se la juega». «Con el control que tenemos ahora, es como jugar a la ruleta rusa: es fácil de que te pillen», aseguró Navarro.

Además, el gijonés tuvo tiempo de explicar que su pasión por la bicicleta viene de su abuelo, ya que le regaló una y empezó a correr, y que el puerto más duro que ha coronado es el Angliru. Además, Dani Navarro se mostró encantado con el entorno de Pola de Lena para entrenar, ya que «ese terreno es de los mas duros de España». Así, concluyó que «un final de etapa en la Cobertoria y Gamoniteiro sería una final de etapa espectacular», y que en caso de que desde la organización de la Vuelta se decida incluirlo, «sería todo un acierto».