Ponferrada, Á. CABRANES

«El empate es el resultado más justo». José Ramón Sandoval no le pide más a un encuentro que tuvo al Sporting, por momentos, contra las cuerdas, y al que los rojiblancos nunca le perdieron la cara para sumar uno de esos puntos que la temporada pasada volaban. «Ha podido ganar cualquiera. Me ha gustado que mi equipo haya sabido levantarse en los momentos difíciles. Me voy satisfecho con este punto. Pocos equipos van a conseguirlo esta temporada en El Toralín», subraya.

No hubo un minuto de respiro en las dos áreas. La falta de control brindó al público un espectáculo vibrante que, sin embargo, hizo sufrir a Sandoval en el banquillo. «Habíamos preparado durante la semana el trabajo entre líneas. Sabíamos que no podíamos permitirnos una pérdida de balón en el centro del campo, porque la Ponferradina te mata. Creo que de ahí ha venido buena parte del peligro que nos crearon», señala el técnico rojiblanco. Sandoval lamenta, especialmente, el mal arranque del equipo en la segunda parte, una fase en la que llegó el penalti parado por Cuéllar y el segundo tanto de los bercianos. «Salimos con una caraja de diez minutos. Sin embargo, el resultado final es una demostración de que este equipo tiene carácter», apunta.

El entrenador del Sporting aplaude la participación de los dos debutantes, Isma López y Lekic. El primero saltó de inicio, protagonizando la gran novedad de la alineación, junto a la posición de Lora en el lateral izquierdo por el lesionado Canella. «Isma se ha mostrado muy cómodo dentro del campo, incluso el equipo le ha buscado en muchas ocasiones, lo que indica que ha sido desequilibrante. A Lekic le hemos sacado en una fase en la que ha respondido fijando a los centrales, dando más libertad a Scepovic para conectar con el centro del campo», concluye.

Claudio Barragán definió el partido como «un espectáculo para los espectadores. Sabía que iba a ser un choque de ida y vuelta, y al final así se ha producido». El entrenador de la Ponferradina da por bueno el punto conseguido, aunque lamenta la falta de acierto de su equipo en ataque para acabar de llevarse los tres puntos. «El Sporting también tuvo sus ocasiones, pero nosotros dispusimos de cuatro claras a balón parado para marcar», recalca.