Aunque el discurso de puertas hacia fuera sea que la plantilla solo se centra en sus resultados y no hace demasiado caso a lo que ocurra en otros terrenos de juego, la realidad dice que al Oviedo no le basta con sumar los últimos seis puntos en liza de la competición. Necesita además que los resultados en otros campos le sonrían. Descansar en la última jornada de Liga se ha convertido en una desventaja para los azules, ya que sus rivales directos pueden preparar la jornada final sabiendo qué resultado necesitan para superar a los de Robles en la tabla.

El Oviedo necesita ganar al Sporting B y esperar algún tropiezo de sus rivales inmediatos. Por delante, el Avilés, segundo con dos puntos más que los azules, recibe al Caudal. El principal perseguidor de los azules es el Guijuelo, quinto e igualado a puntos, que esta semana visita al Marino, séptimo a seis puntos del Oviedo. El Zamora, sexto a tres puntos de los de Robles, también podría superarlos su hiciera un pleno hasta el final de temporada.

Si Avilés y Guijuelo ganaran esta jornada el panorama se le complicaría a los azules. Los de Uribe y el conjunto chacinero se enfrentan la prósima jornada en el municipal de Guijuelo, y a ambos les sería suficiente un empate para depender de sí mismos en la última jornada y asegurarse su presencia en el play-off aprovechando que el Oviedo debe descansar.

El otro equipo involucrado en la lucha, el Racing de Ferrol, tercero con un punto más que el Oviedo, descansa esta jornada. Los ferrolanos tienen a priori el calendario más sencillo para asegurar su pase a la promoción. Tras el descanso, los gallegos reciben a un Burgos que ya no se juega nada y cierran la Liga visitando al Noja, último y descendido matemáticamente.