El de ayer fue un día duro para Raúl Lozano, máximo responsable deportivo del Sporting. Por la mañana mantuvo una reunión con el consejo de administración en la que se decidió el relevo en el banquillo. Por la tarde mantuvo una conversación telefónica con Sandoval en la que le explicó las razones de su destitución. A última hora de la noche aún tenía prevista una última charla con Abelardo para planificar la sesión de esta tarde. Queda pendiente de decidir quién dirigirá al filial en el último partido de Liga. El segundo equipo descansa hoy, por lo que Lozano aprovechará para consultar a Manuel Sánchez Murias. Las dos principales opciones parecen Monchu y Tomás. Otro cuestión delicada será la de reubicar a Sergio Sánchez, quien no seguirá en el primer equipo.