La solución ha sido bastante peor que el problema. Así lo ha asegurado la alcaldesa, Carmen Moriyón, tras observar el estado de parte del circuito de el "kilometrín", abierto hace escasas fechas tras la finalización de las obras de saneamiento que han mantenido el popular circuito cortado varios meses.

La zona recién abierta está completamente encharcada, lo que ha levantado las protestas de los habituales de la pista. "Queriendo arreglar un problema que los usuarios nos habían trasmitido, que era que el suelo era muy duro, con el material que se usó la solución fue peor" indicó Moriyón, quien ya comunicó a la empresa responsable del arreglo del circuito que no quería "explicaciones sino soluciones". Es más, le dio un plazo de 48 horas para que presente un proyecto de arreglo de la zona deteriorada.

"No soy ingeniera, pero no acierto a entender, y así se lo trasmití a los responsables de la obra, que en los tiempos en que estamos no se pueda dar una solución a los problemas del "kilometrín". No cabe en mi cabeza que no se dé con una solución para estos problemas, máxime cuando no se pusieron problemas ni con el presupuesto ni se apuraron los plazos para acabar", indicó la alcaldesa visiblemente contrariada.

El gerente de la Empresa Municipal de Aguas, Pablo Álvarez Cachero, explicó la justificación que dio la empresa: "Lo que han hecho es extender una capa de tierra vegetal para ablandar el terreno. La capa que se puso no está lo suficientemente compactada y con las lluvias de esta semana ha esponjado y se han formado charcos y ofrece un aspecto pastoso que no es el óptimo para correr". Por su parte, el concejal socialista Ramón Gallego criticó ayer a Moriyón, de quien dijo que "queda en evidencia su absoluta incompetencia e incapacidad para asumir responsabilidades de la Alcaldesa de Gijón".