"El equipo ha competido como siempre y generó las mejores ocasiones para llevarse el partido". Luis Hernández asume con rabia el empate sumado en Santo Domingo y lamenta que la fortuna no acompañara en esta ocasión al Sporting para haber transformado alguna de las oportunidades de las que gozó el conjunto gijonés. "Nos faltó un poquito de juego, enlazar dos o tres pases seguidos para generar posesiones largas y entrar más en juego, pero hemos dado la cara en todo momento. Sabíamos que iba a ser difícil, no hemos estado tan acertados como en situaciones anteriores, pero merecimos llevarnos la victoria. No nos vamos a rendir. Quedan tres partidos y todavía puede pasar cualquier cosa", subraya.

"El vestuario está fastidiado. Hay que ganar los tres partidos que nos quedan". Nacho Cases resume la sensación del vestuario rojiblanco, tocado por el empate en Santo Domingo. "Esto es fútbol y siempre duele cuando no consigues el resultado que buscas. Queríamos los tres puntos, tuvimos las mejores ocasiones, pero ya sabíamos que iba a ser muy dificíl vencer al Alcorcón", explica el gijonés. El centrocampista rojiblanco asegura que el equipo lo dará todo en estos últimas jornadas para apurar al máximo las opciones de conquistar la segunda plaza. "No va a quedar nada por nuestra parte para conseguirlo", subraya.

"Fue una pena por toda la gente que vino a animarnos", admitió Cuéllar al final del encuentro. Y es que el Sporting estuvo arropado por más de mil aficionados rojiblancos que incluso agotaron las entradas en Santo Domingo. Algunos de ellos se quedaron a las puertas del campo. Las taquillas del Alcorcón registraron un frenético ritmo de venta durante los minutos previos al partido y también cuando ya se había iniciado. Fue entonces cuando el club madrileño acabó con todo el papel disponible y cerró las taquillas, dejando a algunos seguidores en los aledaños del campo.