El Brujo ha vuelto a hacer de las suyas. Hace meses que Quini anunció su vaticinio. "Este año subimos con el Betis", aseguró. Y acertó, una vez más.Tranquilo en la espera, la eterna espera para que el empate Girona acabara de resolverse, y exultante tras conocer que el Sporting era nuevo equipo de la máxima categoría del fútbol español. "Esta plantilla tan joven, con gente de Mareo, se lo merece", asegura Quini, que ha sido parte importante y testigo de los últimos cuatro ascensos. "Un ascenso para un equipo como el Sporting es de los días más alegres que puedes vivir, te sale el orgullo. Esto es más que jugar la Liga de Campeones", sentencia el Brujo.

Los nervios merecieron la pena para un Quini que admite su sorpresa por la prolongación y la reanudación del partido en Girona. "Nos quedamos alucinados cuando nos enteramos", admite el delegado rojiblanco, en referencia a la noticia de que debían disputarse todavía 40 segundos en Montilivi cuando el Sporting ya contaba con que el encuentro había terminado. "¿Cómo puede ser que los futbolistas, que ya se habían retirado del campo, tuvieran que volver a jugar?", se pregunta extrañado. "La suerte influye y a nosotros nos ha favorecido. En momentos como éste uno se acuerda de excompañeros y amigos que ya no están. Y de la afición. Sin ellos no habríamos llegado a ningún lado", señala.Quini uno de los hombres más queridos por el vestuario, también fue uno de los protagonistas de la celebración sobre el césped del Benito Villamarín y que continuó en el vestuario y en el viaje de vuelta. El equipo agradeció especialmente la presencia de más de un millar de aficionados en Sevilla.