El Comité de Competición ha atendido la denuncia realizada por Joaquim Boadas, expresidente y accionista del Girona, que apuntó a que en las últimas jornadas de Segunda División hubo presuntos amaños que perjudicaron al conjunto catalán. Unos presuntos amaños en los que está implicado el Sporting. Competición ha remitido los hechos al Ministerio Fiscal, organismo que será el encargado de determinar si son constitutivos del tipo penal de corrupción entre particulares. Los partidos señalados son el Mallorca-Girona, Betis-Sporting y Girona-Lugo.

"Veo indicios de que hubo un pago o un ofrecimiento para empatar o ganar estos partidos. Además, tengo una prueba, una grabación en la que uno de los participantes en uno de estos tres partidos reconoce ir primado", señaló Boadas al diario As, que se hace eco de cómo el procedimiento abierto por el expresidente del Girona se eleva al Ministerio Fiscal. La grabación a la que se refiere Boadas están vinculadas a unas presuntas declaraciones de Miquel Soler, técnico del Mallorca, en las que se reproduce que "no cobrarían debido a la derrota" de los bermellones ante el Girona. De haber puntuado, el principal favorecido sería el Sporting.

Boadas defiende que la plaza de ascenso directo debería ser del Girona, ya que apunta a que en la última jornada también ocurrieron casos extraños. Primero, en la visita del Sporting al Benito Villamarín, donde ve actitudes sospechosas por parte del Betis. En cuanto al duelo del Girona ante el Lugo, también señala que los gallegos se emplearon con especial intensidad cuando no se jugaban nada, ya que los de Quique Setién ya estaban salvados y no tenían posibilidad de clasificarse para disputar la promoción. Por el momento, se incoa procedimiento disciplinario extraordinario a Lugo, Betis y Sporting, al entender que existen suficientes indicios de que hayan podido vulnerar dos puntos del código disciplinario: predeterminación de resultados y actos intolerantes en el fútbol.