Los jugadores del Oviedo atraviesan la parte de la temporada que les suele resultar menos agradable. Entrenamientos en los que apenas se toca el balón y en los que manda el preparador físico. Y es que tras las vacaciones toca poner de nuevo el cuerpo a tono y en eso está ahora el conjunto azul. Ayer tuvieron sesión doble de entrenamiento y hoy volverá a suceder lo mismo.

En la sesión de ayer por la mañana la gran novedad fue la presencia por primera vez del nuevo central del club, Kike Torrent. El valenciano ha llegado para jugar en el Vetusta, pero hará la pretemporada a las órdenes de Egea con el primer equipo y de su rendimiento dependerá que tenga la oportunidad de debutar con los azules en Segunda.

En esa misma batalla están el resto de jugadores del filial que van a realizar la pretemporada con el primer equipo. Los delanteros Allyson y David González tratarán de demostrar al entrenador argentino que están capacitados para dar el salto de categoría y que pueden aportar goles al equipo. El juvenil Cristian Rivera se ganó al entrenador en el duelo por el título de campeón de Segunda B, una actuación a la que hizo referencia Egea en su primera comparecencia pública esta temporada en El Requexón. Demostrar que puede estar al nivel del resto de mediocentros del equipo a pesar de su juventud es el objetivo que tiene marcado.

Menos que demostrar tiene el otro canterano que está haciendo la pretemporada con el primer equipo. Y es que Diegui ya jugó diecisiete encuentros la pasada temporada a las órdenes de Egea. El lateral derecho intentará que el entrenador siga confiando en él en una categoría superior. El mexicano Iñaki Domínguez, por su parte, se juega estos días su futuro en el Oviedo. El centrocampista está a prueba.

De los jugadores de la primera plantilla falta por llegar el último fichaje, Edu Bedia. El club aún no ha confirmado cuando se producirá la llegada del mediocentro santanderino, que la pasada temporada militó en el Munich 1860, que juega en la segunda categoría de Alemania.