El Avilés descansa hoy y volverá al trabajo mañana (9.30 horas) en principio en Miranda. La programación incluye sesiones durante el resto de la semana y alguna está previsto que se celebre en el Suárez Puerta, aunque todo depende del tiempo porque la prioridad es tener bien el campo para el debut liguero del próximo domingo (17.00 horas) ante el Mosconia de Nacho Cabo, que entrenó al filial hasta enero el pasado año.

La plantilla avilesina realizó ayer la habitual sesión de los lunes, con un trabajo regenerativo para los que jugaron el domingo y más intenso para el resto. La preocupación de los técnicos es la evolución de los dos jugadores lesionados. El delantero Cristian se metió con el grupo y golpeó el balón con fuerza, aunque sigue recuperándose de la rotura de fibras en el isquiotibial; y el central Otero realizó ejercicios de estiramiento y está entre algodones para intentar llegar el domingo tras sufrir hace dos semanas una pequeña rotura de fibras en el adductor derecho ante el Ceares.

El resto de la plantilla está bien aunque con los habituales golpes y cansancio tras un partido, sobre todo en esta fase de la pretemporada en la que los futbolistas acumulan bastante carga de trabajo para soportar la larga Liga que les espera.