El Avilés afronta la temporada con el objetivo de luchar con los mejores equipos de la categoría para meterse en los puestos que dan derecho a luchar por el ascenso a Segunda B. El club está haciendo un importante esfuerzo para hacer una plantilla competitiva que sea capaz de volver a ilusionar a una afición que aún digiere el traumático descenso de la pasada temporada después de un año marcado por la incertidumbre por los continuos cambios en la gestión, pero que siempre espera lo mejor de los suyos.
El objetivo está claro y el historial de la plantilla dice que hay mimbres sólidos para luchar por él porque hasta nueve jugadores consiguieron al menos un ascenso de categoría durante su carrera, además del cuerpo técnico encabezado por Pablo Lago.
El centrocampista Nacho Fernández (35 años) es el que logró los ascensos más prestigiosos al subir a Primera División con el Deportivo Alavés (2004-2005), con el que ya había jugado en la máxima categoría en la temporada 2002-2003, y a Segunda con la Ponferradina en la temporada 2009-2010, cerrando así una exitosa etapa en el club leonés que había iniciado en 2006. Otros clubes del ovetense fueron el Oviedo B, Siero, Racing de Ferrol, U.D. Logroñés y Caudal Deportivo, en el que jugó las tres últimas temporadas y desde el que llega al Avilés tras jugar 25 partidos y quedar subcampeón de Tercera.
El delantero Jorge Rodríguez (33 años) llega al Avilés con fama de goleador puesto que fue el máximo anotador de Tercera en la temporada 2011-2012 (32 goles) con el Rayo Cantabria, pero el cántabro es también el jugador blanquiazul con más ascensos en su curriculum. El primero fue en 2001-2002 al subir con el Reocín a Tercera; durante su estancia en la Gimnástica de Torrelavega (2005-2009) subió a Segunda B, lo mismo que en el Oviedo (2007-2009), Racing de Ferrol (2012-2014) y Pontevedra la pasada temporada, en el que jugó 36 partidos en Tercera y marcó 16 goles. En total cinco ascensos.
Otros cuatro jugadores lograron el ascenso en dos ocasiones: Nacho Méndez, Guillermo, Matías y Juanma. El centrocampista Nacho Méndez (26 años) consiguió su primer ascenso (2008-2009) con el Oviedo, club en el que se formó y en el que jugó desde alevines a División de Honor juvenil. En la temporada 2010-2011 subió con el Caudal, su primer destino tras dejar el club carbayón y en el que permaneció durante cuatro años, y en la 2013-2014 con el Unión Popular de Langreo, desde donde recala en el Avilés tras jugar el pasado año en Segunda B 35 partidos y marcar 3 goles.
El portero ovetense Guillermo (37 años) subió a Segunda B con el Marino (2004-2005) y con el Unión Popular de Langreo (2012-2014). Llega desde el Caudal, donde jugó 19 partidos y fue subcampeón de Tercera.
El extremo Matías (27 años) también tiene dos ascensos a Segunda B. El primero (2008-2009) con el Oviedo, culminando así los dos años que el langreano estuvo en el club azul, y el segundo (2010-2011) con el Marino de Luanco cerrando su etapa de dos temporadas como azulón. El pasado año jugó en el Lealtad (Segunda B) cedido por el Avilés y metió un gol en 35 partidos.
El delantero Juanma (32 años) subió con el Hispano de Castrillón a Tercera desde Preferente en la temporada 2001-2002, y de Primera Regional a Preferente con el Cudillero en la 2002-2003. Llega desde el Praviano (Tercera) tras jugar 24 partidos y marcar 5 goles.
Cierran el ranking los centrales Pantiga y Otero, y el delantero Cristian con un ascenso en su carrera. Pantiga (34 años) ascendió con el Marino a Segunda B en la temporada 2225-2006, la primera de las siete temporadas que jugó con el club de Miramar. Otero (38 años) lo consiguió con el Langreo (2013-2014), y Cristian (23 años) ascendió con el Avilés B en la histórica temporada 2012-2013. El ovetense empezó el pasado año en el Avilés, pero en enero se fue al Barakaldo y después de cuatro meses volvió a Asturias para sustituir al lesionado Jorge en el Lealtad, pero no tuvo suerte al lesionarse y solo pudo disputar tres partidos. El cuerpo técnico también sabe lo que es subir de categoría. Pablo Lago (41 años) logró el retorno del Langreo a Segunda B en la temporada 2013-2014 tras doce años de espera y un intenso play off en el que tuvo que superar las tres eliminatorias, un logro que compartió con Pablo Busto (32 años), su segundo ahora también en el Avilés. El pasado año fueron ambos subcampeones en Tercera con el Caudal al sumar unos meritorios 84 puntos frente a los 86 que logró el Condal.
Michi, el preparador físico (33 años), subió a División de Honor juvenil con el Avilés en la temporada 2008-2009, y el pasado año con el Femiastur a Segunda compaginando su trabajo en el club avilesino con el Caudal.
