Marcos Torres llegó al Avilés la pasada semana falto de entrenamiento pero el delantero va mejorando físicamente y, tras marcar su primer gol como blanquiazul ante el Mosconia, confía en seguir con la racha goleadora en un campo tan difícil como el Candín, desconocido para él pero del que ya le dieron referencias sus compañeros. "Ya se que es uno de los campos más complicados de la categoría por sus dimensiones y que habrá que ponerse el mono de trabajo para intentar sacar los tres puntos si se puede, y si no uno porque todo lo que sea sumar será importante".
El debut goleador del futbolista gallego fue muy oportuno y dio los tres primeros puntos al equipo esta temporada. Fue llegar y tocar el cielo porque el polivalente jugador gallego acababa de firmar y con su gol resolvió un partido espeso de los blanquiazules. "Fue el partido ideal. Todo el mundo me felicitó y es una gran alegría el poder darle el primer triunfo al equipo", resumió.
El gol llegó en el minuto 85, cuando muchos aficionados ya habían abandonado las gradas resignados con el empate. La jugada se inició en un córner botado por Nacho Méndez desde la derecha que Marcos remató de cabeza, "que no es mi fuerte", en el primer palo cruzando el balón lejos de Dani Rivas. "Tuve la fortuna de meter gol en un balón parado, que en esta categoría va a dar muchos puntos, y son tres puntos importantes para empezar con buen pie", comentó.
La jugada no fue casual puesto que, según relata el jugador, el técnico, Pablo Lago, había preparado en el entrenamiento del sábado las jugadas a balón parado, tanto defensiva como ofensivamente. "Al final conseguimos rentabilizar ese trabajo", señaló.
El partido fue duro ante un Mosconia correoso que tuvo el balón muchos minutos y dos ocasiones muy claras para adelantarse, una forma de jugar que Torres espera de muchos equipos que visiten el Suárez Puerta. "Este es un campo grande y la mayoría de los equipos van a replegarse, a esperar atrás y a emplearse con bastante dureza. Nosotros tenemos que tener paciencia y saber llevar el partido con calma, porque así estoy seguro de que los goles van a llegar", comentó.
Marcos Torres vio mejor al equipo en la primera parte porque, señaló, "la segunda fue más loca y ellos tuvieron sus ocasiones", pero pide paciencia. "Hay que dar tiempo a este grupo y poco a poco iremos cogiendo todos la forma". Su último mensaje fue para la grada del Suárez Puerta. "La afición estuvo muy bien el domingo, animando siempre, y con ellos implicados seguro que haremos un buen año".
