La etapa de ayer contó con un componente solidario. Un grupo de ciclistas asturianos quiso dar visibilidad a una de las enfermedades raras, en concreto la epidermolisis bullosa - conocida coloquialmente como "piel de mariposa"- mediante su ascensión al final de la etapa reina.

Los corredores, que portaban el maillot de la asociación Debra (Asociación de Epidermolisis Bullosa de España), quieren concienciar a la población sobre una dolencia que sufren alrededor de un millar de personas en España. Uno de los participantes en esta iniciativa, José Luis García, destacaba que "al ser una iniciativa solidaria, hace mucha más ilusión".

Todos los corredores del equipo, que además de acudir a las distintas etapas de La Vuelta a España participan en pruebas oficiales, destacaban la dureza de las ascensión a la Ermita de Alba. Alguno de ellos ya conocía el trazado de la prueba. Para José Luis García "es una etapa complicada pero la disfrutamos entre todos". Las paradas para coger oxígeno en una carrera tan exigente se hacen necesarias. Sin embargo, García destaca que "tratamos de detenernos el menor número de veces posible y buscamos apoyar a los compañeros que suben del tirón. Aquí no hay rivales", asegura.