El estreno con el Betis de Rafael Van der Vaart en partido de Liga se quedó en decepción. El holandés aguantó en el campo, durante el encuentro del pasado jueves ante el Dépor, hasta el minuto dos de la segunda parte. Tras un choque con su compañero Rubén Castro, tomó el camino del vestuario, aquejado de unas molestias. Lo hizo sin dar explicaciones, aparentemente, a Pepe Mel, quien asistió sorprendido a la decisión del jugador de irse directamente a la ducha sin mediar justificación ni dar tiempo a que fuera sustituido. El técnico no fue el único sorprendido. La afición bética despidió al futbolista entre silbidos, al contemplar su pasiva actitud. El Betis justificó en una nota oficial que Van der Vaart sufre una lesión muscular en el isquiotibial derecho, que le convierte en baja para el partido ante el Sporting en El Molinón. El que es seria duda para el encuentro de mañana es el lateral Vargas, con molestias en la rodilla izquierda. No es el único que no tiene asegurada su presencia en Gijón. Digard también se ejercitó ayer al margen del grupo, mientras que N'Diaye y Molinero están pendientes de recibir el alta médica.