El Caudal recupera el liderato a base de buen fútbol y a la "ayuda" de un Avilés que venció al Colunga colocándose junto a los mierenses en lo más alto de la clasificación. Los blanquinegros superaron a un Ceares con bajas y que estrenaba técnico, Iñaki Eraña, con solvencia por un 2-0 que se quedó corta dadas las numerosas ocasiones que desaprovecharon los de Iván Ania. Lo peor del duelo para los locales fueron las lesiones del meta Bussman quien tuvo que ser sustituido tras un golpe fortuito con un jugador cearista y la de Saavedra quien dejó a su equipo con diez, ya habían efectuado los tres cambios reglamentarios, diez minutos con una dolencia muscular.

Este Caudal está de dulce y ayer se deshizo de un Ceares que salió con ganas pero le duraron a veinte minutos, los que tardaron los mierenses en "engrasar" su maquinaria ofensiva. En esos instantes entró en juego el jugador más en forma, un Damián que sirvió el primer gol con un gran centro desde la izquierda a Iván y anotó el segundo en el minuto 36 al recoger un rechace de la zaga en un disparo de Annunziata. Con este 2-0 se acabó un duelo vistoso para la parroquia local pero complicado para los cearistas. Un equipo que nada pudo hacer ante la superioridad blanquinegra, salvo las paradas de Davo, y que sólo remató una vez ante la meta caudalista y fue en el minuto 62 en una falta de Pablo que desvió Chechu Grana a córner.