La atleta búlgara Silvia Danekova, inscrita en la prueba de 3.000 metros obstáculos, se convirtió en el primer caso de dopaje de los Juegos tras dar positivo por EPO en un control al que fue sometida tras su llegada a Río de Janeiro. La siguiente ha sido la nadadora china Chen Xinyi, de 18 años, tras el test antidopaje al que fue sometida el 7 de agosto, después de quedar cuarta en la final de 100 metros mariposa en Río 2016. Chen dio positivo por hidroclorotiazida, un diurético, y ha solicitado un contraanálisis, destacó su federación.