El chino Zhen Wang, derrotado hace un año en el Mundial de Pekín por el español Miguel Ángel López, se tomó en Río una revancha de oro olímpica sobre el campeón del mundo de 20 kilómetros marcha, que se hundió a mitad de prueba y llegó undécimo a la meta en lo que fue una gran decepción pues había fundadas esperanzas de medalla.

China hizo un histórico doblete en la prueba corta de marcha. Wang se colgó el oro con un tiempo de 1h19:14, seguido de Zelin Cai (1h19:26) y del australiano Dane Birth-Smith (1h19:37), que solo por cinco segundos privó del podio al brasileño Caio Bonfim (1h19:42, récord nacional).

López se recuperó algo en el último tramo de la prueba y acreditó una marca de 1h20:58, mientras que el segundo español, Álvaro Martín, que había estado más tiempo por delante, cayó al puesto 22 con 1h22:11.

El atletismo español, que no pisa un podio olímpico desde Atenas 2004 (plata de Paquillo Fernández, bronces de Joan Lino Martínez y Manuel Martínez), continúa fuera del cajón de honor.

Horas antes la etíope Almaz Ayana consiguió el primer oro del atlestismo en Río con un nuevo récord del mundo: 29:17.45.

Con su registro ganador, Ayana borra de las listas el viejo récord que la china Junxia Wang tenía desde el 8 de septiembre de 1993 con una marca de 29:31.78 conseguida durante los Mundiales de Stuttgart'93.

Desaparece así de los libros oficiales el último récord bajo sospecha perteneciente a la cuadra del chino Ma Junren, el técnico que en la década de los noventa achacaba la bondad de las marcas de sus discípulas a la sangre de tortuga.