La plantilla del Avilés cierra esta mañana el trabajo de la semana en el Suárez Puerta (10.30 horas) con vistas al partido de mañana (12.00 horas) contra el Lugones en casa, y con la derrota en Langreo (1-0), la primera de la temporada, totalmente olvidada según explicó ayer el técnico, Pablo Lago. "El mensaje de la semana fue de normalidad y tranquilidad porque está empezando la temporada y esto es muy largo", explicó.
El equipo se queda con la buena trayectoria desde que empezó la Liga (cinco victorias y una derrota), con el juego desarrollado y con la capacidad generar ocasiones. "Sigo pensando que se hizo un partido muy completo en Ganzábal, aunque con poco premio, y esta es la línea a seguir porque compitiendo así el equipo va a conseguir rendimiento. Hay que mantener la calma y la tranquilidad y seguir haciendo las cosas bien", añadió el técnico.
Esta ha sido una semana de mucho trabajo para tratar de corregir los errores cometidos en Ganzábal, sobre todo en la estrategia defensiva, "que tenemos que mejorar mucho porque es un punto importantísimo en esta categoría" y la falta de acierto ante la meta rival. "Arriba están jugando muy bien, se asocian muy bien y eso nos transmite mucha confianza porque se crean muchísimas ocasiones", explicó Lago para añadir: "Habrá momentos que quizás no tengamos tanta fluidez y estemos más acertados cara al gol porque son cosas que pasan muchas veces en el fútbol, pero hay que dar continuidad al juego fluido que nos permite crear muchas ocasiones cada partido".
El objetivo ahora, señala el técnico, "es mantener la buena línea que lleva el equipo en el Suárez Puerta, competir muy bien contra el Lugones e ir mejorando muchas facetas que necesitamos".
Todo ellos ante un rival al que califica de "muy competitivo y equilibrado que encaja poco y que compite muy bien con sus armas". Un rival, añadió, "con buen juego de estrategia, con dos centrales (Hugo y Dioni) de mucha experiencia porque llevan muchos años jugando en equipos buenos de Tercera, con medios centros muy dinámicos, y con gente arriba con mucha velocidad que están haciendo goles".
Un equipo, en resumen, a respetar mucho aunque Lago apunta que los más importante es que el Avilés esté bien. "Nosotros, más que en el rival, tratamos de centrarnos en lo nuestro, en mantener el buen juego y la fluidez para que sigan apareciendo ocasiones y finalizarlas, claro".
El técnico advierte de que habrá que tener paciencia. "Ellos no tienen prisa y aprovechan sus opciones cuando les llega el momento; por eso no podemos bajar la concentración y tenemos que ir al cien por ciento, como en todos los partidos de casa".
El técnico dudó durante toda la semana el mantener el 4-2-3-1 habitual durante esta semana o cambiar a un pivote con dos interiores, pero parece decidido a mantener el sistema de juego "que tan bien nos ha ido hasta ahora porque ese doble pivote nos da mucho equilibrio, aunque puede haber momentos durante el partido que se pueda optar por otra opción, pero en principio seguiremos con el mismo sistema".
Seger y Álex Arias. Y se apuntan dos novedades respecto al once del Ganzábal. Una es la vuelta de Seger al doble pivote junto a Dudi, una vez que el sueco se ha recuperado de la inflamación de garganta que le dejó fuera para Langreo; y la otra el debut en el once de Álex Arias, bien como media punta o en la banda izquierda. "Posiblemente demos a Álex la oportunidad de salir de mano porque lleva un trabajo muy bueno desde que se incorporó hace cuatro semanas. Hemos ido poco a poco, él está con ganas y ansioso de competir y le tuvimos que frenar varias veces, pero poco a poco irá entrando en el equipo", concluyó Lago.
