La España más asturiana, con las gijonesas Natasha Lee y Sara González, y la lenense Marta González Piquero en sus filas, a las que habría que añadir a las jugadoras del Hostelcur Gijón María Díez y Anna Casarramona, se hacía ayer con la victoria en la decimotercera edición del Campeonato del Mundo, disputado en Iquique (Chile) al derrotar 3-2 en la prórroga a Portugal con un "gol de oro" de María Díez.

Con este título España iguala los cinco campeonatos de Argentina y se coloca al frente de la tabla histórica del medallero, pues también sumó dos platas y tres bronces.

La final, a la que España llegó tras otro gol oro de la asturiana Nathasa Lee en la semifinal frente a Argentina, resultó tremendamente igualada, con muy poco que ver con el partido que ambos equipos habían disputado ya en la fase de grupos y en el que las españolas se impusieron por 4-0.

El choque resultó intenso y con continuas acciones ofensivas de mucho peligro ante ambas porterías, si bien el marcador no se abriría hasta el minuto 15, gracias a un disparo lejano de Casarramona que se coló por la escuadra de la portería portuguesa.

A la vuelta de los vestuarios no tardó España en aumentar su ventaja. Laura Puigdueta ponía el 2-0 al aprovechar una pelota que superó a la cerrada defensa lusa y que remató desde dentro del área. Las cosas se ponían muy de cara para las españolas, pero apenas cinco minutos después Marta Vieria acortaba distancias y devolvía la tensión al choque sus compañeras se fueron a por el empate. Marlene Soussa lo lograba en el minuto 32 y el partido se iba a la prórroga, en la que el equipo que primero marcase, el denominado "gol de oro" se proclamaba campeón.

Y el gol fue de María Díaz, máxima goleadora de la Liga española en las últimas temporadas y que ponía de esa manera un broche de oro a su actuación en el Mundial. Un título que venía a resarcir la pésima actuación española en el anterior Mundial, que cerró con una novena plaza.

Un magnífico papel el de esta España con acento asturiano y un gran éxito también el del Hostelcur Gijón, que puede presumir de contar con cuatro campeonas del mundo en sus filas.