Pep Guardiola vuelve al Camp Nou y el barcelonismo, por más que le reconozca como el impulsor del Barça actual, lo reconoce como el enemigo para encabezar el grupo de la Liga de Campeones. El Manchester City es más competitivo desde la llegada del técnico catalán, que tiene una espina clavada desde su primera visita, con el Bayern Munich (3-0). Y, como hace dos temporadas, la gran preocupación de Guardiola será frenar al tridente azulgrana. "¿Qué podemos hacer para controlar el talento?", se preguntó Pep cuando le mencionaron a Messi, Luis Suárez y Neymar.
Para Guardiola, este partido no tiene nada que ver con el de 2015: "Con el Bayern teníamos la obligación de ganar siempre la Champions. En el City llevamos dos meses juntos. Es poco tiempo para cambiar cosas, aun estoy conociendo a mis jugadores. Es una prueba para ver dónde estamos, cómo respondemos ante el mejor equipo del mundo". Luis Enrique devolvió las flores: "Pep tiene una incidencia bestial en su equipo desde la pretemporada. Ya lo he visto con mecanismos característicos de los equipos de Pep. Quieren el balón, si no lo tienen presionan...".
Piqué tuvo elogios para los dos: "El concepto que tenemos de Pep es el mejor posible y guardamos un grandísimo recuerdo de su etapa. Comparar es muy difícil. Con ambos se ganaron muchos títulos y a nivel personal también. Con los dos siempre me llevé muy bien. Luis te aporta muchas cosas. Llegábamos con el 'Tata' Martino un poco de bajón y llegó Luis y lo reactivó otra vez. Lo mismo hizo Guardiola con Rijkaard. Las dos épocas son bastantes parecidas".
Guardiola desmintió algunas informaciones sobre los intentos de City de "pescar" en el Camp Nou: "No he llamado a ningún jugador del Barça este verano. No llamé a Messi ni a Neymar ni a Luis Suárez ni a Busquets ni a Iniesta", subrayó. Sí reconoció que se puso en contacto con Ter Stegen cuando se enteró de que se planteaba cambiar de aires porque quería jugar más, aunque acabó fichando a Bravo.
Con especial vehemencia ha desmentido haber telefoneado a Messi para convencerle: "Lo que mas deseo es que Leo acabe su carrera aquí, porque no hay ningún sitio mejor para él. Si un día decide a irse, y ojalá no sea así, probablemente habrá una lista de cinco, seis o siete clubes que lo querrán fichar".
