La máxima del fútbol dice que cuando un equipo perdona sus ocasiones lo acaba pagando, y eso es lo que le pasó ayer al juvenil blanquiazul ante el Racing de Santander. Los de Xiel dominaron más el partido y tuvieron ocasiones para puntuar, pero no estuvieron acertados ante el excelente portero Iván, que salvó a los suyos en varias ocasiones, y acabaron cediendo los tres puntos en las postrimerías del partido.

El técnico avilesino resumió así el partido y la derrota. "No nos acompañó la fortuna y es una pena porque creo que merecimos algo más, pero hay que meterlas y ganar los partidos. No vale lamentarse". Y añadió: "Ahora hay que levantar la cabeza y dar la cara en Lugo, uno de los mejores equipos de la categoría, para intentar dar la sorpresa".

El Avilés puso en muchos aprietos al rival por la rapidez de César y Borja, y a lo ocho minutos un disparo de Marcos tras pase de César fue desviado a córner por Iván en una buena estirada. El Racing respondió en el 26 con un cabezazo de Goñi a saque de córner de Gon que rozó el poste, pero el dominio era local.

La segunda parte empezó con un pase de César y remate de Jorge que despeja suave Iván, pero el balón vuelve a Jorge que adelanta a los avilesinos de tiro raso. Se ponía bien el partido pero el equipo se echó atrás por las internadas de Gon y en el 53 llegó la jugada clave. Primero pudo sentenciar el Avilés con un disparo de Carlos que paró el portero, y en el saque de Iván llegó el primero visitante y la jugada polémica del partido. Gon recogió el pase y sólo ante César empata de tiro raso. El juez de línea levantó la bandera por fuera de juego, pero el árbitro lo desautorizó y dio validez al gol.

Los locales acusaron el golpe, pero siguieron insistiendo y en el 77, un disparo de Carlos se marchó fuera por muy poco. Cañizo pudo adelantar a los visitantes en el 78 al plantarse solo ante César, pero el portero local acertó a despejar a córner, y en el 84 Iván toca con la pantorrilla un disparo de Borja que sacó la defensa visitante cuando se cantaba el gol.

En el 86 marca el segundo el Racing en un centro desde la derecha que nadie consigue despejar hasta que le cae al Goñi, que bate a César de tiro raso. Los de Xiel siguieron luchando hasta el pitido final en busca de la igualada pero ya no pudieron y se quedaron sin recompensa.