El noruego Magnus Carlsen, campeón mundial de ajedrez, y el aspirante, el ruso Sergey Karjakin, alcanzaron ayer el ecuador del encuentro que disputan en Nueva York con la corona en juego tras acordar tablas en la sexta partida, el mismo resultado que en las cinco anteriores. Fue el juego más rápido de los disputados. Cuando apenas se habían cumplido la hora y media, y después de 32 movimientos, ambos jugadores decidieron repartirse el punto en una situación de completa igualdad con dama, cuatro peones por bando y alfiles de distinto color. El marcador del encuentro, previsto a 12 partidas, refleja ahora un empate a 3 puntos. Hoy será día de descanso, y el domingo se reanuda la batalla con Carlsen al mando de las piezas blancas en la séptima partida, primera de la segunda vuelta.