"El globo no se desinfla" aseguró ayer el presidente del Gijón Jovellanos, Juan de Álvaro a propósito de la marcha del equipo esta temporada. "Éramos conscientes de que íbamos a pasar muchas dificultades esta temporada y que la situación no es fácil pero también es cierto que estamos teniendo mala suerte a todos los niveles" afirmó. Una mala suerte que se tradujo en las importantes lesiones de Alberto Molina y Richi Díez, dos hombres claves en la plantilla por su nivel y su experiencia. Y una mala suerte que se mantiene ya que el portero Nacho Fernández también está muy tocado y es probable es que sea baja un par de jornadas.

El calendario que tiene por delante el conjunto gijonés va a ser muy importante para ver si el Gijón Jovellanos puede luchar por mantener la categoría, que es el objetivo marcado para esta temporada. Carabanchel, Tolosa, Torrelavega, Nava y Zarautz son los rivales que tiene por delante antes de acabar la primera vuelta. todos ellos están de la mitad de la tabla hacia abajo y es contra ellos con los que se jugará la permanencia. Para ello Juan de Álvaro espera que "cada jugador de el 120 por ciento, los jóvenes tienen que tener confianza en si mismos".