Carlos Martínez se ha convertido en una pieza fundamental en el engranaje del Unión Financiera. El alero gallego, de 20 años, llegó al Unión FInanciera con un contrato de un mes ante la baja de Eduardo Hernández-Sonseca y ha ido ganándose la confianza del cuerpo técnico para quedarse para todo lo que resta de temporada.

Se trata de un gran trabajador, que aporta en defensa y en ataque, una especie de pegamento para el cuadro ovetense. El alero reconoce que la victoria (82-72) ante el Leyma Coruña fue muy importante, sobre todo por llegar pocos días después de caer de forma contundente (71-51) en la cancha del Melilla. Un partido, el que disputaron ante el club en cuya cantera comenzó a jugar, que les marca la línea a seguir a partir de ahora: "Tenemos que seguir en la línea de intensidad y energía que pusimos ante el Coruña. Otros factores del partido como que entre o no entre la bola no lo puedes controlar al 100 %, pero sí que debemos demostrar tanto en casa como fuera esa intensidad", añadía.

El conjunto ovetense viajará el sábado (20.30 horas) a Marín, para enfrenarse al Peixegalego. Otro encuentro ante un conjunto gallego, aunque en este caso de los que están en la parte de abajo de la tabla. Algo que no debe ser un motivo para confiarse: "Es un equipo contra el que ya nos enfrentamos en pretemporada y son muy duros. Al final conseguimos la victoria pero no fue fácil. Es cierto que ellos van abajo en la tabla pero nosotros tenemos que mejorar fuera de casa y esta es una buena oportunidad", analiza Carlos Martínez.

El Unión Financiera no quiere marcarse objetivos y prefiere mirar sólo al siguiente partido. Y eso que los ovetenses, con nueve victorias, están peleando por las primeras posiciones de la clasificación y mantienen opciones de clasificarse para disputar la Copa Princesa. Un título que se juega entre los dos primeros clasificados de la LEB Oro al término de la primera vuelta de la competición. Está todo muy igualado. La LEB Oro ha demostrado que cualquier equipo es capaz de ganar a cualquiera y eso la convierte en una competición bonita. Nosotros no nos marcamos ningún objetivo, vamos partido a partido aunque si es cierto que queremos acabar lo más arriba posible. Ahora solo pensamos en el partido contra Marín", zanjaba el jugador gallego.