El Real Avilés logró una trabajada victoria ayer en el Suárez Puerta ante un Urraca que le puso las cosas muy complicadas. Era un duelo de necesidades: el conjunto local, que no cobra desde agosto, quería hacer un buen papel ante la mirada de los nuevos inversores que han llegado esta semana al club y el visitante necesitaba los tres puntos para intentar abandonar la última posición de la tabla. El Avilés, al menos, pudo brindar la victoria a los mexicanos y mantenerse líder.

El equipo avilesino trató de hacer un buen partido ante sus nuevos gestores mexicanos, pero el Urraca supo trabar el choque para que los locales no se sintieran cómodos. Con todo, el triunfo se quedó en el Suárez Puerta gracias a los goles de Borja Granda, en propia puerta, y Álex García ya en el descuento para cerrar el marcador.

La primera mitad fue local. Los de Lago tuvieron el balón y se lanzaron a por la portería, pero no estuvieron acertados ante el gol. El ansia por tener el partido encarrilado pronto pudo con los jugadores del Avilés por momentos y, mientras tanto, el Urraca esperaba bien plantado en defensa tener su oportunidad, que no llegó en los primeros 45 minutos.

El blanquiazul Palazuelos fue avisando al Urraca de que quería marcar, con dos cabezazos que no acabaron con el balón en la portería, y los delanteros Jorge Rodríguez y Álex García también hicieron de las suyas, pero sin suerte. En el minuto 34 subió al marcador el primer gol del Avilés en una jugada embarullada. Marcos Torres puso el balón al segundo palo donde el visitante Borja Granda se adelantó a Palazuelos para despejar de cabeza, pero el balón salió en dirección a su propia portería. El defensa del Urraca pidió insistentemente una falta del centrocampista del Avilés, pero el árbitro confirmó el gol que adelantaba a los locales.

Tras el descanso, el Avilés siguió teniendo el balón, pero le costó mucho más llegar a la portería rival, porque el Urraca estaba haciendo muy bien su trabajo, tapando los espacios, sin perder la posición y frenando todo lo posible a los blanquiazules. En los segundos 45 minutos, los visitantes si tuvieron alguna jugada de peligro, como el tiro de Cristian que, tras una galopada por la izquierda, disparó muy cruzado para mandar el balón fuera. El paso de los minutos, puso más nervioso al Avilés, que tenía sus opcioenes pero no lograba sentenciar el choque. Entonces aparecieron los errores y las posesiones se acortaron, abriendo más el partido.

Los cambios parecieron beneficiar más al Avilés que al Urraca, aunque no fue hasta el añadido cuando Álex García logró romper la férrea defensa visitante para colocar el 2-0 en el marcador, aprovechando un centro de Álex Arias desde cerca del córner.