Su forma de alcanzar los banquillos de la LEB Oro, segundo escalón del baloncesto nacional, fue diferente. Arturo Álvarez se hizo cargo del recién ascendido Araberri antes del inicio de la temporada. Tras construir un equipo en tiempo récord, fue una de las revelaciones del inicio de temporada y ahora se mantiene a una victoria del playoff. Guillermo Arenas accedió al banquillo de Magia Huesca hace tres jornadas. Tras la destitución de su anterior técnico, la directiva oscense pensó en el asturiano para tratar de conseguir la permanencia. Ambos entrenadores representan al Principado en los banquillos de la segunda categoría baloncestística nacional y se enfrentan este sábado en Vitoria.

"Estoy muy contento por cómo está transcurriendo la temporada", asegura Arturo Álvarez. El equipo vitoriano es undécimo en la tabla. "De las 23 jornadas transcurridas, hemos estado 22 en playoff; además, hemos ganado la Euskal Kopa a San Sebastián y hemos dado sustos a equipos de la zona alta como Palencia o Bregoán", expone el entrenador mierense.

La situación es distinta en Huesca. Arenas logró la victoria ante Lleida en su primer encuentro, pero sus dos siguientes compromisos se saldaron con derrota. "Esta semana hemos reaccionado bien a la derrota ante Breogán, estamos trabajando a un alto ritmo y queremos seguir afianzando conceptos tanto en ataque como en defensa", asegura Guillemo Arenas.

Sus objetivos para esta temporada son los mismos; conseguir la permanencia para sus equipos. "Cuando llegué a Vitoria, el presidente me comentó que era un sueño jugar en esta categoría y que teníamos que tratar de salvarnos", admite Arturo Álvarez. Por su parte, Guillermo Arenas tratará de salvar a un Magia Huesca que ahora se encuentra a una victoria de la permanencia.

Ambos son inquilinos de los banquillos de una LEB Oro muy igualada. "No hay ningún equipo descolgado por abajo y no parece que nadie vaya a conseguir el ascenso antes de tiempo", apunta Arturo Álvarez. Para Guillermo Arenas, "el nivel se ha igualado y todos los conjuntos son parejos, sobre todo en la zona alta".

Y es que conseguir el puesto de técnico en LEB Oro se antoja complicado. Dieciocho son los entrenadores de la segunda categoría del baloncesto español. "Estamos en una categoría muy exigente y el nivel de los técnicos es muy elevado", apunta Guillermo Arenas. El técnico ovetense , que se encuentra en su primera experiencia lejos del Principado, cree que "esta experiencia puede ayudarme a crecer".

Por su parte, Arturo recuerda su pasado. "Empecé a entrenar con 16 años y ahora, a mis 40, tengo la sensación de estar cumpliendo un sueño y haré lo posible por no desaprovechar esta oportunidad", expone el mierense, quien en anteriores temporadas llegó a ejercer como ayudante de Pablo Laso en esta categoría.

Tras coincidir en el Villa de Mieres, ambos entrenadores se tienen un aprecio mutuo. "Guillermo es un técnico que ha demostrado su valía tras temporadas brillantes en Oviedo y cuyos equipos destacan por su elevado ritmo y por la exigencia, me parece un tipo muy honrado y muy honesto", asegura Arturo Álvarez de su colega. Por su parte, Arenas apunta del mierense que "es un entrenador muy preparado y que dota a sus equipos de un estilo propio, tanto ofensiva como denfesivamente, jugar ante sus equipos es realmente difícil, ya que cualquier jugador te puede hacer daño".

El próximo sábado, a partir de las 18.00 horas, el polideportivo de Mendizorroza será testigo del enfrentamiento entre estos dos entrenadores. Se medirá un equipo vasco a otro aragonés, pero un pequeño trozo del Principado de Asturias estará presente en este encuentro. El baloncesto asturiano será el vencedor independientemente de lo que dictamine el marcador. Asturias exporta su talento en los banquillos por todo el panorama nacional.