"Pablo Lago sigue contando con el cien por ciento de la confianza de la dirección deportiva del Real Avilés y en ningún caso será destituido". Así de contundente se mostró el director deportivo del club, José Luis Tamargo, para rebatir la información publicada ayer por este diario en la que bajo el título: "Pablo Lago, en la cuerda floja", se comentaba sobre la posible destitución del técnico tras los empates con el Langreo (0-0) en el Suárez Puerta y con el Lugones (1-1) en Santa Bárbara.
El director deportivo señala que "en el seno del club estamos centrados en el trabajo diario y en conseguir los objetivos marcados a principios de temporada, por lo que entendemos que noticias de este tipo no debieran incomodar al equipo en una fase tan decisiva de la temporada".
Lo cierto es que esta contundencia era necesaria para dejar clara la posición del director deportivo porque a cada tropiezo del equipo resurge desde personas cercanas al club el debate sobre el futuro del técnico. Y eso es vox populi porque desde que empezó la temporada no se esconden para hacer los comentarios.
En esta ocasión, la mala imagen que dieron los blanquiazules en Lugones, faltos de intensidad, encendió la mecha después de no haber podido ganar al Langreo en un partido vital para las aspiraciones avilesinas al título.
El propio Lago hizo un profundo análisis de autocrítica tras un partido "que nos dejó una sensación muy mala" ante el Lugones. "Tenemos que ser mucho más contundentes, agresivos e intensos para igualar en este sentido a los rivales, que se crecen cuando juegan contra el Avilés, y a partir de ahí podrá aparecer la calidad que se presupone que tenemos. Y si no conseguimos esa intensidad vamos a sufrir cada semana".
El técnico recordó que jugar con el Avilés en Tercera "lleva un peso diferente porque hay que sacar todos los partidos". Y añadió: "Estar en el Avilés es tener presión todo el año y competir en momentos difíciles como toca ahora que no logramos ganar fuera. Hay que volver a casa, vestirse la camiseta del Avilés otra vez y sacar rendimiento. Y para eso necesitamos gente muy enchufada, que compita al cien por ciento y eso es lo que buscamos para los próximos partidos".
Los dos empates suponen un freno a las aspiraciones avilesinas y ver como el Sporting B desplaza al equipo a la tercera posición pero la situación en la tabla, con los mismos puntos que el filial rojiblanco y a uno del líder Langreo, es buena cuando aún faltan 12 partidos (36 puntos en juego) para concluir la temporada.
Lago recuerda que el Langreo también lleva dos empates (Avilés y Oviedo B), "lo que refleja la competitividad de la categoría", aunque insiste en que el equipo no puede fallar. "Lo difícil es ahora volver a ponerse la camiseta del Avilés contra el Siero y ser competitivos cada semana hasta el final", concluyó.
