"No ofende quien quiere, si no quien puede y la gente que delinque tiene muy poca credibilidad". Así respondió el director deportivo del Avilés, José Luis Tamargo, a las declaraciones de José Ramón Cañedo, director ejecutivo, en las que le cita como "el culpable" de la situación que atraviesa el club "porque abrió un agujero en el barco al tratar de llevar a Álvaro López a otros clubes".

Tamargo insiste en que "no doy ningún valor a sus palabras porque no se le conocen méritos deportivos, más bien delictivos", y dice que "lo ocurrido con el tema del dinero en el Avilés ya pasó en otros sitios y desgraciadamente no será el último episodio similar porque la zorra cambia de pelaje pero no de mañas".

Cañedo también puso en duda la apuesta de Tamargo por la continuidad de IQ en el Avilés. "Hace dos días y a petición mía nos reunimos en Salinas Dennis Colmenares, Julio Scheilch y yo para tratar de desbloquear la posible compra, y nunca lo habría hecho de no querer su continuidad en el club", replicó. Respecto a su compromiso con el club, el director deportivo expuso sus argumentos. "Desde tiempos de Pepe Frana, gran presidente, contribuí con jugadores como Espejo, Esteban, Manel, Luciano, Moreiras, Luis Castro, Monchu... y logramos subir a Segunda. Y desde ahí ayudé al club, incluso económicamente haciéndome cargo de alguna nómina y traje a técnicos como Fabri González, que logró la única Copa Federación del club".

Respecto a esta temporada, Tamargo señala que "entré para ayudar a José María Tejero y cuando llegó IQ, el Avilés era líder en solitario (ahora lo es compartido con el Sporting B), aunque parece que ahora sobro yo, como dice Tejero, porque de pronto el problema soy yo, no él".

Y es que el presidente declaró ayer que "yo le di a Tamargo la ocasión de reivindicarse y tomó el camino equivocado. Él es el que sobra, no yo, y dejará el Avilés si se rompe el contrato con IQ porque no tiene vinculación alguna con el club ni conmigo".

En este punto, Tamargo lanza un órdago. "Creo que debería de decidir la afición y si la afición considera que yo soy el culpable, me voy. Ojalá él también haga lo mismo y si la afición lo pide ,que venda y se vaya al minuto. Yo me iré sin nada, con las manos vacías, pero él se irá con las manos llenas porque llevará dinero".

Tamargo insiste en que "mi equipo número uno es el Avilés, otra cosa es que si Álvaro quiere comprar y no le venden, es libre de pensar en buscar otro club, pero ese es asunto suyo, no mío".

El director deportivo, por último, precisó que "mi trabajo por el club está ahí, pero Tejero me echó atrás la vuelta de Raúl a La Toba cuando el acuerdo era total, porque estaba Xiel con un contrato de cuatro años. Y son cosas que van minando poco a poco".