Nuevo asalto en el combate que libra el Avilés por su inmediato futuro entre el gestor, Álvaro López, que quiere comprar para no marcharse y el propietario, José María Tejero, que no quiere vender. Los representantes de ambos, la gerente Dennis Colmenares por IQ Finanzas, y Julio Scheilch, el consejero delegado del máximo accionista, vuelven a reunirse hoy para aclarar las cosas después de la riada de informaciones de los últimos días.

La reunión se hace a petición de IQ y en principio, de lo que no se hablará será de comprar porque el dueño ya dejó claro que no vende, aunque López insiste en que sería lo mejor. "No se si habrá acuerdo, la verdad, aunque yo diría que sería lo mejor para todos pero veo difícil que suceda porque yo al menos no cambiaré mi oferta de compra y no quiero más presiones de ningún tipo".

López advirtió de que "si me presionan no soy manco", pero señaló que "no necesito este estrés en mi vida". Y añadió: "Si se puede limpiar todo y bien encantado, si no prefiero continuar con mi forma de trabajar que es muy sana y construir win-win". Esta es una sociedad anónima mexicana de inversiones relacionada con el fútbol que gestiona López y cuyas acciones salieron a la venta a través de internet.

Lo cierto es que el gestor ve inminente su marcha. "Estoy preparando mis maletas, pero no puedo porque tiene implicaciones legales y administrativas, así que estamos viendo una salida limpia". López señaló que los últimos acontecimientos son un motivo más para irse: "Me siento muy presionado los últimos días a irme, más aún porque han estado intentando dañarme con el caso Cañedo". Y añadió: "El éxito económico debe ir unido al social y al respeto de tus conciudadanos. Eso es muy valioso, aportar en tu comunidad y ser una persona de valor ayuda mucho a vivir en paz. Me gusta ganar pero en buenas condiciones si no, no creo que valga la pena", precisó.

El director financiero ya recordó que "no somos el primer gestor que llega y todos han salido mal" y se reafirmó en su opinión de que "si no hay un cambio en la propiedad no es posible desarrollar el proyecto y es una evaluación profesional no una opinión".

Tejero espera que IQ explique sus planes para el club y si se queda o no y, sobre todo, en que condiciones se quiere ir o quedar. El máximo accionista ya comentó que "somos dos hombres de negocios y lo que hicimos en un despacho con un acuerdo se puede deshacer sin problemas con otro acuerdo", aunque mostró su malestar porque el asunto haya sido tratado a través de los medios y de las redes sociales. "Eso nunca me había pasado", afirmó.

Un tema a aclarar durante la reunión de hoy es el posible incumplimiento por parte de Tejero de algunas condiciones del contrato de gestión firmado por las dos partes a mediados del pasado mes de diciembre. Unas supuestas irregularidades que fueron detectadas por los abogados del inversor hispano y que, en caso de denuncia, podrían obligar al propietario a devolver parte del dinero aportado hasta ahora por IQ Finanzas desde diciembre (en torno a los 200.000 euros) más los correspondientes intereses.

López tenía previsto visitar Avilés en abril pero, señala, "estoy con muchas reuniones porque ya adquirimos dos equipos en México, aunque no se pueden revelar detalles porque aún falta resolver algunos contratos. Por eso no he podido ir por Avilés y no podré pronto", comentó.

Parte de la plantilla ya cobró. López cumplió su compromiso y la empresa mexicana pagó ayer la nómina de este mes. Los jugadores que residen en Avilés fueron llamados por la tarde para cobrar y el resto lo hará hoy, dado que ayer no se entrenó. López comentó que "es una pena" que la plantilla viva esta situación de inestabilidad en el club "porque están trabajando muy bien".