José Ramón Cañedo, el artífice de la llegada al Avilés de IQ Finanzas y Álvaro López, anunció ayer que "no voy a hacer más declaraciones del Real Avilés" y "por el bien del club, de mi familia y de mi propia persona", señaló que "no se hablará más de mi ni en redes sociales ni en ningún medio de comunicación" bajo la advertencia, añadió, de que, "cualquier comentario que trascienda me veré obligado a interponer demanda porque quiero que todo el mundo se olvide de mi".

Cañedo fue actualidad esta semana, primero por el anuncio de López de interponer una demanda en su contra por "8.000 euros extraviados en enero cuando él administró nuestras cuentas", según palabras del responsable de IQ Finanzas, y después por sus declaraciones a los medios de comunicación culpando a José Luis Tamargo (el director deportivo del club) de ser "el verdadero responsable" de la intención de Álvaro López de dejar el Avilés "al ofrecerle otros equipos, como el Compostela o el Castellón".

El ovetense fue el director ejecutivo del club desde la llegada de IQ Finanzas a mediados de diciembre hasta que fue sustituido por Dennis Colmenares, la actual gerente, a principios de febrero y mostró sus mejores deseos para el equipo. "Desear de todo corazón que el Real Avilés llegue a su objetivo de ascender a Segunda B y meterse en la Liga de Fútbol Profesional".

Cañedo pidió que "la afición, el presidente y los gestores se unan por un bien común" y por el futuro del club blanquiazul, el más antiguo de Asturias. Y concluyó agradeciendo "a los aficionados y a todos en la ciudad el apoyo" durante su estancia en el club, y con un "aúpa Avilés !!!!"