Parece que las cosas sobre el inmediato futuro del Avilés ya están claras. Después de tres semanas de estériles discusiones sobre la posible venta del club, que siempre descartó el propietario, José María Tejero, la incógnita a despejar ahora es si el gestor, Álvaro López, director financiero de la mexicana IQ Finanzas, apuesta por marcharse o por seguir al frente de la entidad según el contrato firmado en diciembre.

Y esa es la idea que se reiteró en la reunión mantenida ayer entre la gerente, Dennis Colmenares, en representación de IQ Finanzas, y Julio Scheilch, el consejero delegado del máximo accionista, José María Tejero.

López aún no tenía ayer una decisión tomada según mantuvo en conversación mantenida con este diario, aunque adelantó que "es muy posible que tengamos que irnos según la recomendación de nuestro abogado", y avanzó que el martes o el miércoles de la próxima semana dará a conocer su decisión final después de revisar una vez más la parte "legal y administrativa" del contrato de gestión firmado a mediados de diciembre.

"Dudo que sigamos porque un 80 por ciento de nuestro análisis indica que la opción más viable es retirarse, y ojalá sea en buenos términos como es nuestra intención, pero no se si eso será posible", añadió.

El empresario, sin embargo, por momentos se ve claramente fuera y asegura que no está decepcionado "de Avilés, ni de los jugadores y menos de la afición". López valora positivamente la experiencia vivida estos tres meses en el club. "Estoy contento. Creo que salgo con muchas cosas positivas que me servirán en mis próximas inversiones en todos los aspectos". Y añadió: "Creo que no soy el primero que sale así de Avilés y si el río suena es que piedras trae".

López no puede evitar pensar en el futuro de la entidad e insiste en que "este club necesita cambiar de presidente y eso es lo que arrojó nuestro estudio, pero si el presidente no quiere es un tema suyo", y aclara que "no tenemos nada en contra suya (de Tejero)", pero califica de "generosa" su oferta de compra. "Hicimos un aporte y ojalá que eso sirva".

"Para progresar es importante dejar el orgullo de lado y hacer lo que sea más razonable, pero creo que no se está usando ese criterio y es una pena", concluyó.