Gijón, Dani BLANCO

El respeto y el miedo a perder paralizó a Roces y San Martín en el duelo de la zona alta de la tabla. Pese a ello, ambos disfrutaron de sus opciones de triunfo, principalmente el conjunto gijonés, que dispuso de un penalti a los 27 minutos en el que Zeus se encontró en dos ocasiones con las buenas intervenciones de Alberto.

El encuentro se jugó principalmente en el centro del campo, sin apenas contabilizar ocasiones claras de peligro en un duelo en el que las defensas maniataron con acierto cualquier atisbo de peligro sobre sus respectivas áreas. Hasta que llegó el penalti a favor del Roces por mano de Arroyabe. Ahí, Alberto fue el gran protagonista deteniendo el lanzamiento. El San Martín dispuso de una falta peligrosa por mediación de Mateus, en el que su disparo se fue rozando el palo derecho.

El conjunto de Florín llevaba por su parte la amenaza al área del San Martín a través del balón parado, con especial atención a los saques de esquina en los que entraron en juego el poderío aéreo de Miguel y de Reyero. Sin embargo, el cuadro gijonés no estuvo atinado para desequilibrar la balanza a su favor. En la segunda parte, el partido continuó por los mismos derroteros, aunque la entrada de Vila le dio mordiente por la banda derecha. Un disparo del centrocampista fue lo más reseñable, con la buena intervención de Dani Díaz para repartir con justicia los puntos.