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Al Palo

La unidad...

...Que podría terminar en una de esas asombrosas consignas clásicas como "hace la fuerza" (aunque el original venga de "la unión"). Viene a cuento de que el término se ha impuesto a equipo reserva. De hecho hay variantes como la "cara B" o la "versión", que por lo visto tapan el malsonante "reserva" o "suplente". Muy parecido a los vaivenes que, a lo largo de la historia, atropellaron a las notas académicas, que funcionaron con el suspenso y llegaron al muy deficiente (lo que suponía una agresión en toda regla). También tuvo su chance "insuficiente" (otra agresión disfrazada) y no apto (que era como darte un meneo a traición). No lo es menos "progresa adecuadamente", que es como si al escrutado le dieran una palmadita para decirle: "Tira millas que con el tiempo espabilarás".

Casi que no; casi mejor dejar que el oído se acostumbre a un término, que el tiempo todo lo adapta. Parece que el suspenso no ofende como ofendía y "reserva" tiene más encanto o es menos faltoso que "segunda unidad", que es como se denomina al equipo del Madrid que está jugando determinados partidos. Claro que, en este caso, todo el mundo está disculpado ya que la segunda unidad merengue puede ser también la primera con cuatro arreglos (o dos) y viceversa. Luego nada que objetar a estos pretendidos estímulos para el equipo madridista que salte al campo. Todo se renueva y, ciertamente, "reserva" estará en desgracia hasta que se resguarde en una oleada vintage que la ponga de moda.

El caso es que estos supuestos recambios futbolísticos madridistas tienen más que ver con la calidad de los jugadores que con planificaciones estudiadas a golpe de integrales por partes. Las unidades del Madrid dan todas el nivel. Sólo falta templar y que en los partidos claves Zidane siga acertando con la mezcla (la tercera unidad) para que por fin le concedan el título de entrenador especial capaz de hacer fútbol de alta escuela, fútbol de perfumería pija como el que se le concedió a alguno sin más olor que el que le concede un sector mediático. Claro que a Zidane esto de los perfumes no le pega. Tiene pinta de funcionar con un desodorante de oferta y preocuparse más de jugar bien al fútbol con todas esas unidades que tiene en la plantilla; queremos decir reservas, suplentes, cara B, versión...

En fin, que este "Al palo" va, como todos, de tonterías (reservas) hasta que pasen un par de jornadas o tres para ver si podemos entrar en fase de descojono o acabar descojonados.

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