El Caudal Deportivo de Mieres jugará una temporada más en un Segunda B tras una sufridísima y merecida victoria ante un Pontevedra que no vino a pasearse al Hermanos Antuña.

A los de Ania, la victoria les certificaba la permanencia independientemente de otros resultados y salieron decididos a por la misma.

En unos primeros veinte minutos impresionantes pudieron perforar la meta rival en numerosas ocasiones pero el meta Renedo respondía con agilidad a todos los remates de los de Mieres.

El jugador con más ocasiones ante Renedo, Javi Sánchez, fue el que por fin pudo perforar la portería rival con un remate de cabeza que colocó en la misma escuadra.

El partido parecía encarrilado pero solo seis minutos después, Iker Alegre rompía el fuera de juego y superaba al Bussmann de precisa vaselina.

Este tanto detuvo el ímpetu de los asturianos que llegaron al descanso sin grandes ocasiones.

Tras el paso por los vestuarios el Caudal volvió a ser el equipo dominador de la primera parte pero no conseguía crear peligro ante Renedo.

La impaciencia aparecía en las gradas cuando Quero, en el minuto 59, de magistral disparo desde fuera del área puso el 2-1 definitivo en el marcador.

Si alguien, a falta de media hora, pensaba que la permanencia estaba conseguida estaba equivocado. El Pontevedra subió líneas y llegó con peligro ante la meta de Bussmann.

En un par de ocasiones rozaron los gallegos el tanto del empate con el agravante de que en ese caso, y por los resultados en otros campos, el Caudal descendería directamente a Tercera División sin tener la posibilidad de jugar el play out.

Pitido final y alegría desbordada en el Hermanos Antuña. 45 puntos necesitó el Caudal para lograr un salvación carísima pero el equipo de Iván Ania ha hecho durante todo el año méritos más que suficientes para conseguirla.

La temporada 17/18 Mieres podrá disfrutar, de nuevo, de fútbol de Segunda División B.