Parece que la temporada de pesca en los ríos salmoneros asturianos empieza a recuperarse, aunque poco a poco. Ayer, como ocurriera el viernes, volvieron a capturarse siete piezas, cinco de ellas en el Narcea, todas en zona libre. A cebo natural se echaron a tierra cuatro a cargo de: Pablo Díaz Cuervo, de Cornellana, de 4,800 kilos; Gonzalo Fernández Suárez, de Quirós, de 5,400; Marino Montes Pérez, de Laviana, 5,900 kilos, y José Manuel Medina Alvarez, de Gijón, 5,700 kilos. Además, un ribereño que no quiso aportar sus datos a los medios de comunicación sacó un salmón a mosca de 5,300 kilos.

Los otros dos salmones de la jornada, también de pequeño tamaño, salieron en el Sella, a cebo natural. Los sacaron: Severino José Obaya Estrada, de Villanueva, de 4,850 kilos, en zona libre, y Francisco Louzao Ruzo, de Vizcaya, de 4,620, en el coto de Remolina.

Los otros tres ríos se quedaron en blanco. Sigue sorprendiendo la tardanza del Esva en aportar el campanu. Hay peces pero el caudal hoy bajaba especialmente turbio.