La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

"Quizás haya que copiar a Finlandia o Noruega"

Pésima temporada en las cristalinas aguas del río de la divisoria con Cantabria. Se consiguieron 63 salmones, y si nos ceñimos a los 55 que pasaron por el precinto de Panes (el resto fueron devueltos al agua), estamos ante la peor cifra desde 1949, en que se dispone de estadísticas de capturas. El descenso respecto a temporadas pasadas ha sido muy acusado, ya que en 2016 salieron 204 salmones, 233 en 2015 y 157 en 2014. Números que deben hacer reflexionar a una Administración que lleva años prestando muy poca atención a uno de los mejores ríos de Asturias.

Las condiciones de caudal no fueron favorables, pero ello no debe ser excusa para justificar la escasa entrada de salmones, ya que durante la temporada se produjeron algunas puntas de agua que no consiguieron meter el número de peces deseado en el río. Además, el desgraciado accidente de un camión cisterna a finales de mayo produjo el vertido de 35.000 litros de gasoil en Niserias. Si malas era ya las perspectivas entonces, este hecho no ayudó, en absoluto, a mejorar la situación del río.

Ante las escasas opciones de capturar salmones, muchos de los aficionados que visitaban el Cares se dedicaban a intentar pescar reos, conscientes de que, posiblemente, es el mejor río de Asturias para pescar estas pequeñas balas de plata. El mayor ejemplar de la temporada se echó a tierra en el coto de La Higar, a cebo natural, el 23 de mayo, arrojando un peso de 6,400 kilos. Monejo fue el coto más generoso, con los 12 ejemplares que se consiguieron en sus pozos.

-¿Haga una valoración de la temporada?

-Como se vaticinaba por las malas condiciones climatológicas, y la consiguiente falta de agua, ha sido muy mala. El caudal fue demasiado bajo durante toda la temporada. Cuando llegó alguna punta de agua sí subieron peces, pero en cuanto baja el río se corta esa entrada.

-¿Quedan suficientes ejemplares para el desove?

-Con lo que hay ahora creo que no, hay muy poco salmón para asegurar un buen desove, pero aún queda parte del verano y todo el otoño para que suban más ejemplares. Seguro que cuando llueva y aumente el río entran salmones. La valoración hay que hacerla en diciembre, en el momento del desove.

-¿Debería suponer esta temporada un punto de inflexión?

-Hay que tomar medidas urgentes en el Cares. Debemos reflexionar, el río necesita ayuda y protección. Es imprescindible aumentar el número de alevines de la repoblación, más un año como éste, donde se juntó la escasez de agua con el desgraciado accidente y el vertido de 35.000 litros de gasoil.

-¿Hay que cambiar algo de cara al futuro?

-Aparte de aumentar considerablemente las repoblaciones, lo demás que siga como está: los pescadores ya tenemos muchas restricciones encima. Que se centren en controlar el cormorán, cuya población aumenta y causa muchos daños. En el Cares, además, la Administración debe centrarse en arreglar los caminos y los accesos a muchos pozos: es una vergüenza ver pasillos con el hormigón roto, la maleza tapando caminos... En algunos casos es hasta peligroso, sobre todo para los aficionados que no tengan buenas condiciones físicas.

Compartir el artículo

stats