-¿Haga una valoración de la temporada?
-Fatal, ha sido muy mala, apenas ha habido salmones. La escasez de agua que hemos tenido durante toda la temporada ha afectado negativamente en este sentido; se ha juntado todo, la falta de peces con el escaso caudal y así es difícil que remonten los salmones.
-¿Quedan suficientes ejemplares para el desove?
-Hay poco salmón, alguno de buen peso, pero la realidad es que ha quedado un número muy reducido de ejemplares; esperemos que entre alguno más de ahora en adelante. Nunca hay salmones suficientes para el desove en este río.
-¿Debería suponer esta temporada un punto de inflexión?
-No lo se, pero tengo claro que el problema no es causado por los pescadores, la pesca en alta mar hace mucho daño, cada temporada se nota más, y es algo que habría que intentar solucionar lo antes posible.
-¿Hay que cambiar algo de cara al futuro?
-En el caso del río Eo es imprescindible hacer repoblaciones con un elevado número de alevines. Desde hace años está abandonado por parte de la Administración, totalmente desatendido. Es un gran río, con muchas posibilidades para la pesca, pero hay que mirar por ello.
No parecía fácil empeorar el registro de la temporada pasada en que salieron 17 salmones de las aguas del Esva, pero los 10 ejemplares capturados esta temporada confirman la triste y cruel realidad de un río donde hace ya tiempo se encendieron las alarmas ante el pasotismo de una Administración que parece no enterarse, o no querer hacerlo, de la verdadera situación de la cuenca. No tiene mucha explicación que estén permitiendo morir un río que llegó a dar más de 800 salmones en una sola temporada.
Aunque se vio afectado por la falta de caudal parte de la campaña, estuvo pescable y con buenas condiciones de visibilidad, algo muy importante en un río donde se pesca a vista la mayoría de las ocasiones. Pocos salmones han quedado en sus aguas, y las perspectivas de cara al desove no son nada buenas.
El mayor salmón fue echado a tierra en el coto de Brieves, el día 30 de mayo, siendo pescado a cebo natural y dando un peso de 5,700 kilos. Trevías fue el coto más generoso en capturas con 4 salmones.
