El bloqueo federativo del Real Avilés se mantiene pese a que ya se procedió al pago de la deuda que lo había provocado. Y es que los gestores del club intentaron sin éxito que la Federación levantara el veto que impide dar el alta a los jugadores, pero la situación judicial de la entidad nacional tiene paralizados los trámites. Ese será el primer escollo para poder dar de alta a los jugadores tanto en la Federación como en la mutualidad, pero no el único. "Toda esta situación está complicando que terminemos de confeccionar la plantilla. No hacen más que ponernos trabas a los gestores. Se escaparon fichajes por la situación en la que está el club, pero esperamos que esto se aclare y poder dar garantías a los cuatro o cinco jugadores que faltan por venir", sentenció ayer José Luis Tamargo, director deportivo del Avilés.

Como es lógico, los jugadores piden estabilidad antes de firmar, y la guerra en la que está sumido el Avilés no es la mejor carta de presentación. Ahora que las negociaciones por la venta se han roto, se retoman los anteriores conflictos entre propiedad y gestores y, la desconfianza, ha alejado aún más las posturas hasta un punto que parece que solo el juzgado puede solucionar.

José María Tejero, presidente del club, se remite al acuerdo que firmaron los gestores a su llegada al club en diciembre, afirmando que no retirará la demanda de rescisión de contrato que presentó en el Juzgado de Instrucción número 3 de Avilés y que tampoco realizará ningún movimiento como la firma de las fichas de los jugadores, si los gestores no cumplen con sus obligaciones: "Presentar un presupuesto de la temporada avalado económicamente, hacer frente a las deudas de la escuela y el pago del material necesario para la temporada", según el presidente.

Álvaro López, cabeza de los gestores, por su parte, afirma que sus abogados están estudiando interponer acciones legales contra Tejero. "Lo que parece es que esto es un grupo de estafadores que se dedican a que la gente que viene a invertir de forma honesta, se vayan llenos de problemas y deudas como se han ido las administraciones anteriores. Si no coopera, si no nos dejan trabajar, vamos a hacer caer todo el peso de la ley sobre él", sostiene López. "Acabamos de pagar una deuda que pertenece a un proyecto anterior -se refiere a los 32.000 euros que supusieron el bloqueo de los fichajes- y hemos pagado otras que no nos pertenecían y aún así ponen problemas. No nos permitieron administrar la Toba, no nos dejaron poner un administrador, no sabemos que gastos están haciendo en ella y ahora quieren darle la vuelta a la tortilla. En ningún momento aprobé los gastos de la escuela, así que no debo pagarla", añade.

Por el momento, el director deportivo sigue trabajando "contracorriente" para conseguir los refuerzos necesarios para completar el equipo: "Nos urge un central y un pivote que intentaremos cerrar esta semana, pero nos hace falta poder dar las altas. Para el resto de refuerzos habrá que ir estudiando como va la pretemporada, qué necesidades hay".