Su localidad natal, Zamora, y los circuitos del Jarama y de Jerez fueron tres de los escenarios que rindieron tributo ayer a Ángel Nieto. En la fachada del pabellón polideportivo de Zamora, que lleva su nombre, se colocó una fotografía gigante del piloto. Por el interior de la instalación desfilaron durante toda la jornada decenas de personas que firmaron en el libro de condolencias. Un minuto de silencio y un ramo de flores conformaron los actos principales de homenaje en el circuito de Jerez, uno de los preferidos por Nieto. Mientras, los responsables del circuito madrileño del Jarama abrieron sus puertas a los aficionados para que homenajeasen a Ángel Nieto en el monumento al piloto.