Ya van 23 ediciones, pero la gran familia que se ha formado en torno al torneo de golf LA NUEVA ESPAÑA, trofeo Liberbank, no sólo se mantiene, sino que sigue creciendo. Muchos de los jugadores repiten y, de paso, atraen a otros amantes del deporte golfístico a una competición que esta vez alcanzó los 590 inscritos, sesenta más que el año pasado. "El torneo ya es un clásico del verano", reconocía uno de los grandes triunfadores, Miguel Díaz-Negrete, que raro es el año en el que falla a la cita, en la que ya acumula un importante palmarés. "Casi siempre vengo, intento no perdérmelo", comentaba al término del torneo.

Al igual que él, Miguel García, que fue campeón en segunda categoría junto a su esposa, Florinda Pérez, es asiduo al torneo de golf con más participantes de toda España. "Es una competición emblemática y muy atractiva", destacaba.

Ángel Cerdán, por su parte, compitió junto a su amiga Isabel Fano Infiesta. "Nos llevamos muy bien, pero juntos sólo jugamos este torneo porque tenemos nuestras respectivas parejas y jugamos con ellas en otras competiciones. Y el año que viene, por supuesto que volveremos", aseguraba Cerdán. Y tan bien se llevan que, de hecho, ganaron el primer premio en primera categoría.

Los triunfadores más jóvenes fueron Pablo Ros y Mateo Urones, que con once años se alzaron con el título de campeones en la categoría sub-21. Y prometen dar más guerra en ediciones venideras. "El torneo es muy atractivo y está todo muy bien organizado. Seguiremos viniendo", aseguraron durante la entrega de premios.

Otros elogios fueron destinados al personal que se encarga del mantenimiento y la dirección de las instalaciones municipales de La Llorea. Luisa María López, directora comercial de LA NUEVA ESPAÑA que presentó la entrega de premios, destacó "el excepcional trabajo del personal del campo de golf". Un elogio que cosechó una buena ración de aplausos entre el numeroso público asistente a la ceremonia, que se celebró en la zona exterior anexa al local hostelero del campo de golf dadas las buenas condiciones climatológicas. De hecho, pese a la lluvia caída en días anteriores, ésta respetó en general la mayor parte de momentos de juego, algo que contribuyó al impecable desarrollo de la cita golfística más numerosa de España.