El hijo pródigo vuelve a casa. Fran Cárdenas dice que se fue un niño y viene alguien que es "menos niño". La afición de Pumarín ansía reencontrarse con uno de los jugadores que le dieron al club el ascenso a LEB Oro y, sobre todo, con alguien que les hizo ser muy felices en Pumarín.
- ¿Cómo está el Oviedo Baloncesto tres años después?
-Lo que más me ha impresionado es como ha crecido, no solo en lo deportivo, también en lo social. La oficina, lo que ha crecido el pabellón... En lo deportivo, cada campaña se van superando. El club ha dado dos pasos adelante.
- ¿Y usted ha cambiado?
-Soy un poco más maduro, el Fran que se fue sigue teniendo las mismas características a la hora de jugar; de garra, de querer superarse, y sobre todo de trabajar con humildad. He cambiado sobre todo en la experiencia, se fue un niño y ahora soy menos niño. Espero tener más tablas sobre el campo, más saber estar y así tomar mejores decisiones.
- Le ha tocado dar un paso atrás y volver a la LEB Oro después de tres años en la ACB. ¿Qué sea en Oviedo se lo hace más fácil?
-Después de tres años en busca de oportunidades y haber tenido pocas... Trabajar mucho, mucho, mucho y tener pocas oportunidades, pues no me importaba dar un paso atrás. Y tenía claro que de dar un paso atrás tenía que ser Oviedo sí o sí. Tenía que ser una muy, muy, muy buena opción para no elegir a Oviedo. Además, mostraron interés, conozco el club, conozco a la gente; también me tiró mucho que entrenaran al equipo dos tíos como Carles (Marco) y Javi (Rodríguez), que han sido bases en la ACB. Ponerme a sus órdenes me motiva mucho.
- ¿Ha notado el cariño de la afición cuando se anunció su fichaje por el Oviedo?
-Sí. Que después de tres años la gente te siga queriendo es muy gratificante. Me hace mucha ilusión que se sigan acordando de mí y esa es una de las cosas por las que vine; por el ambiente que se vive en Pumarín, por la afición, que está siempre con nosotros.
- ¿Qué se cuenta del Oviedo por ahí fuera?
-Sobre todo se habla de Pumarín, de que no gana nadie aquí. Un campo de este tipo es muy importante, al final la afición te ayuda a ganar partidos. También se va escuchando el nombre del Oviedo por todos sitios. Los resultados están ahí.
- ¿Es un club más respetado?
-Que el Unicaja decida que el Oviedo es un club idóneo para que dos jugadores como Romaric (Benemele) y Kenan (Karahodzic) crezcan dice mucho de cómo se está trabajando.
- ¿Qué se puede esperar del equipo esta temporada?
-Va a haber un equipo que se lo va a dejar todo en cada partido, que vamos a hacer todo lo posible para ganar el máximo de partidos. Vamos a trabajar mucho.
- El único que queda de su etapa en Oviedo es Víctor Pérez. ¿Qué me dice del capitán?
-Su trayectoria habla por él, es un veterano que aparte de ser un gran jugador es una excelente persona, que hace la vida más fácil a los que tiene alrededor; eso no es bueno solo para mí, también para todos los nuevos. Para los más jóvenes tener a Víctor en un equipo... Yo, si fuera director deportivo, siempre lo tendría en mi equipo. Él más que nadie sabe lo que significa este club y lo que cuesta crecer. También es clave la labor de su mujer, Cristina Romero (responsable de comunicación y patrocinios), que hace una labor que no se ve y que es muy importante.
- ¿Ya sabe quién será su Juan José García este año?
-Tenemos la suerte de tener a jugadores muy físicos, como Romaric y Barro, y trataré de darle las máximas asistencias a ellos y a todos los demás.
