Fue un duelo excepcional donde Pantano tiró de Alberto porque pensaba que podía lograr podio y especialmente la victoria de etapa. Cuando Contador superaba en 1-36 al grupo de Froome y por 17 segundos arrebataba virtualmente el tercer puesto a Kelderman, el Sunwed pasó a perseguir a fondo y rebajar diferencias porque a Pantano se le acababan las fuerzas antes Vía-Pará .

Ahí, al alcanzar Contador a algunos fugados, tuvo un momento de ayuda de Enric Mas y Marc Soler, los mismos que él había señelado como sus sucesores. Tras anular a Marczynski, empezaba el verdadero Infierno en la Cuesta de les Cabanes. Con rampas del 21% de desnivel y con 7 kilómetros hasta la meta y con sólo 36 segundos de ventaja sobre el grupo de Froome.

Ahí fue cuando el de Pinto demostró la clase, la rabia y la raza que tiene tirando para arriba en el más difícil todavía. Así llegó a la rampa temible de la Cueña de les Cabres donde se iba a decidir la etapa.

Esos ánimos hicieron volar a Alberto en las rampas del 23% de desnivel cuando Pellizotti tirando de Nibali se le había acercado a 45 segundos y donde sobrevivían Froome con su compañero Poels, Zakarin y Kelderman. Pero ahí empezó a pasar apuros Nibali y Kelderman, segundo y tercero de la general. Mientras el británico quería ganar esta Vuelta siendo el mejor. Guiado por su gregario Poels se fueron hacia adelante.

El repechón de El Aviru, con 21% de desnivel, fue el otro punto clave. Contador debía aguantar la embestida por detrás Poels y Froome, que tenían unos metros de ventaja sobre Zakarín que a su vez distanciaba a Kelderman para arrebatarle la tercera plaza del podio. Sólo restaban 2 kilómetros para la ansiada meta.

Todos en sus duelos iban rodando con mucha agonía aunque Alberto mantenía 1-05 sobre Froome y 1-30 sobre Zakarin y unos metros más a Kelderman y algo más a Nibali al que estaba salvando la segunda plaza Pellizotti.

Antes de coronar la dura rampa final del Angliru, a 1 kilómetro de meta, parecía que Poels alcanzaría a Contador para arrebatarle la etapa, pero Froome acusó el esfuerzo y tuvo que esperarle cuando estaban a sólo 29 segundos del madrileño.

Esto le dio alas a Contador para verse en solitario y asegurar el triunfo de etapa en su gran adiós y de una fenomenal manera. Hasta lo disfrutó antes de cruzar la meta con 17 segundos sobre Poels y Froome.

A 35 segundos llegaba Zakarin, que pasaba a ser tercero de la general al distanciar en 36 segundos al desfallecido Kelderman al que había incluso superado Nibali, apoyado por Pellizotti.

Todo era una fiesta en el alto del Angliru por la gesta y triunfo de etapa de Contador aunque por 20 segundos no acabó tercero en el podio general.

Por su parte los dos ciclistas asturiano, Iván García Cortina y Dani Navarro, acusaron sus problemas físicos. A esto había que sumarle el desgaste de la fuga del día anterior. lPor eso llegaron a la meta con una diferencia de tiempo de un cuarto hora con respecto a la cabeza.

Hoy en El Paseo de la Castellana Chris Froome certificará su victoria en La Vuelta a España.