El miércoles, el titular del Juzgado número 7 de Avilés desestimó la demanda de medidas cautelares presentada por el gestor del club, Álvaro López, para recuperar el mando en la parcela deportiva, que le arrebató el mismo que se la había concedido en diciembre, José María Tejero. A la espera del desenlace definitivo, la historia de los últimos años se repite: Tejero gana, el Avilés pierde. No es que una decisión judicial en otro sentido permitiera abrir un futuro prometedor para el Avilés. Lo que sí sabemos es lo que le espera con Tejero al mando: impagos, mentiras y ruido, mucho ruido.
