La plantilla azulona entrenó ayer en Miramar plena de optimismo y con la baja del portero Davo, que se pedió el partido con el Valdesoto por una contractura en el isquiotibial muy similar a la que padece Luis Morán. Los dos estarán toda la semana entre algodones, aunque es dudoso que puedan llegar para visitar el domingo (17.00 horas) al Langreo.

El técnico, Oli Álvarez, no acelerará la vuelta de ninguno de los dos porque se avecina una semana con tres partidos: Langreo; el Roces en Miramar el miércoles 1 de noviembre (12.00 horas); y la visita al Oviedo B en el Requexón (17.00 horas) el domingo 5.

Omar Fernández es baja porque, aunque empezó con el grupo, se recupera más lento de lo previsto de la operación quirúrgica que sufrió. Borja se dolía ayer por carga en el gemelo dada la acumulación de partidos, pero en principio llegará ante el Langreo.