El Villarreal logró la primera victoria de su historia en el Santiago Bernabéu gracias un solitario gol de Pablo Fornals en los últimos instantes del partido, que agrava aún más la crisis de un Real Madrid sin puntería en la primera parte y sin ideas en la segunda, y que podría terminar la primera vuelta de la Liga a 19 puntos del Barcelona, aunque con un partido menos. Fornals desató la furia del Bernabéu con un gol a tres minutos del final que condenó al Real Madrid a su cuarta derrota de la temporada en la Liga, la tercera en el Bernabéu. La falta de puntería y el colapso en ataque castigaron una vez más a un Madrid que llega muy dañado a los cuartos de Copa y a los octavos de la Liga de Campeones.

Los de Zinedine Zidane saltaron al Santiago Bernabéu con las ideas algo más claras que en partidos anteriores. Los blancos buscaban al Villarreal en su campo, intentando ahogar su juego combinativo. Fruto de recuperaciones en la medular o tras precisas triangulaciones, los locales se acercaron con asiduidad a la meta de los amarillos, pero se vieron condenados, una vez más, por la falta de puntería.

Tras un gol anulado a Bale por fuera de juego a la salida de un córner, Marcelo abrió la veda de las ocasiones con un potente disparo desde fuera del área al que Asenjo respondió con eficacia. Cristiano, tan persistente como impreciso en el remate, gozó de las oportunidades más claras para inaugurar el marcador, primero con un libre directo que Asenjo desvió al travesaño en el minuto 23 y, posteriormente, con un mano a mano que el portugués cruzó en exceso. También hubo tiempo para la polémica, ya que el Madrid reclamó dos penaltis. Primero por una mano de Álvaro tras un remate de Bale y después por un derribo a Cristiano Ronaldo, segundos antes de que Undiano señalase el fin de los primeros 45 minutos.

Una vez más, el Madrid se desinfló en la segunda parte. La fluidez desapareció. La falta de ideas llevó a los de Zidane a abusar de los centros laterales, despejados con facilidad por la defensa del "submarino". El técnico francés dio entrada a Marco Asensio y a Lucas Vázquez a veinte minutos del final. Aunque el Villarreal no se acercaba con demasiado peligro, la sensación de que un nuevo desastre era posible flotaba en el ambiente. Los peores pronósticos se cumplieron a tres minutos del final cuando una contra terminó en un mano a mano que Unal erró, pero el rechace fue aprovechado por Fornals para marcar de vaselina.