Ni los 40 saques directos ni los 74 golpes ganadores pudieron con el tenista gijonés. Pablo Carreño venció esta madrugada en el Abierto de Australia al luxemburgués Guiller Muller (número 25 del ránking ATP) tras librar una dura batalla contra los aces y el calor. Hasta 39 grados marcaron los termómetros de Melbourne. “Ha sido muy, muy, muy duro”, resumía el asturiano, después de 3 horas y 18 minutos de partido y cuatro set. Carreño, que vuelve al top 10, pasa a octavos de final por primera vez en el torneo y podrá mirar a cuartos si vence al ganador del duelo Mauric Cilic- Ryan Hamson.

El gijonés tan sólo cedió un set ante Muller, aunque los tres restantes estuvieron muy reñidos. El resultado fue 7-6, 4-6, 7-5 y 7-5. El luxemburgués, que ganó a Rafa Nadal en el último Wimbledon, tiró desde el minuto uno de su brillante saque, llegando a marcar hasta 40 aces. No fue fácil bloquear ni su fuerza en el saque ni tampoco en otros golpes: colocó 74 ganadores. Pero Carreño puede con eso y con más y así lo demostró en la Margaret Court Arena. El tenista suma su quinta victoria en Australia y acumula más de veinte en Grand Slam. Esta semana en Australia puso al público en pie al colocar un globo justo en la línea, que golpeó de espaldas.